Y re-pienso, y re-pienso...¿Por qué?
...
No sé...
Si me dejo ser, estoy siendo vulnerable, si dejo de pensar me dejo ser, lo cual me hace vulnerable. Idear estrategias va en contra de mi nueva política de ser, con todo: luces y sombras, aciertos y errores, cosas buenas y malas. Sin embargo...entre la espada y la pared me encuentro (dijera la plena) y a pleno me siento en esa situación. ¿Por qué?
No sé...
Porque es más joven, porque es atractiva, porque me desconecta, porque quiere conectar conmigo, hay algo, una constante, una fija que me quita el sueño, que me paraliza, que me estanca en un estado del que me cuesta salir, y me siento como en arena movediza, donde cada rama que agarro para escapar se rompe y me hunde con imágenes de distintos (y bastante cercanos, de hecho) momentos, y de situaciones en que nos encontramos, y me dan placer, y me enternecen, y (la puta madre...) me encariño. ¿Por qué?
No sé...
Porque me da atención, porque me da cariño, porque me da importancia, porque me da calor, porque me da placer, y reconocimiento...
pero...
entonces...
Si me da, me da y me da...
Quizás lo peor que pueda pasar es que ya no me de.
...el mayor miedo es: a perder algo, que te lo saquen? o a que eso que te lo da ya no te lo dé?
Si lo pienso desde esta perspectiva, todo aquello que recibo, es en parte lo que yo emulo del contacto con ella...mmm... Donde lo simbólico y lo vivencial se juntan, ahí en el "anillo intersección" de esas dos esferas es donde la ubico a ella, en esa coyuntura es que me siento regocijado al verla, y es al verla o al imaginarme lo que me produce el estar con ella que me vuelvo a hundir en estas representaciones que yo mismo me creé. El psicólogo Omar Villalobos afirma en una ponencia que "el cerebro no distingue la realidad de la fantasía", y soy consciente de que el enganche que sentimos hacia otr@ está basado en gran parte porque vemos en esa persona algo que calza perfectamente con algo nuestro, algo que nos refleja en cierto modo, o que necesitamos, de manera inconsciente.
Mmm.... Más complejo...
En definitiva, y sacándole lo terminológico-complicado, puedo (y en gran parte quiero) dejarme ser; sin tomarme responsabilidades que no me competen en cuanto a ella, como su indecisión en cuanto a su pareja o la idea de compartir por un breve lapso de tiempo un espacio laboral.
Una frase que me he repetido muchas veces en estos días: "Take it as it comes", y no sé por qué pero sospecho que inconscientemente conecta con la situación que estoy atravesando, digo, más allá de lo obvio. Y ahora no me encuentro con ganas de seguir deliberando y explicar(me)lo.
Markav
viernes, 7 de febrero de 2014
Suscribirse a:
Entradas (Atom)